octubre 02, 2017

La Estructura Cerebral de Hombres y Mujeres



Los hombres se casan con las mujeres con la esperanza de que ellas nunca cambien, mientras que las mujeres se casan con los hombres con la esperanza de que ellos sí lo hagan. Esta frase de Albert Einstein sirve para ejemplificar cómo los hombres y las mujeres somos diferentes en muchos aspectos. Y si nos introdujéramos en los cerebros de ambos géneros, podríamos observar que hay diferencias notables en las conexiones neuronales entre ambos, las mismas que dan sustento a las diferencias a nivel cognitivo y conductual.

El cerebro del hombre y el de la mujer no se estructuran de la misma manera, al menos en cuanto a las conexiones entre los hemisferios. Científicos estadounidenses han analizado los circuitos neuronales de cerca de un millar de hombres y mujeres, desde la infancia hasta la edad adulta.

el conectoma  mapa de las conexiones neuronales  apunta a que algunas diferencias en los comportamientos de hombres y mujeres pueden ser atribuidas al modo en que nuestros cerebros están "conectados" internamente.


Las diferencias entre hombres y mujeres están en las conexiones cerebrales

Un estudio realizado por diferentes instituciones de investigación estadounidenses publicado en Procedimientos de la Academia Nacional de Ciencias (PNAS) en abril 2016, sostiene que el cerebro humano alberga tanto características masculinas como femeninas.

Trabajos anteriores han mostrado que existen diferencias entre sexos a nivel cerebral, pero nunca se había hecho un estudio con tantos participantes para observar las conexiones neuronales a lo largo de todo el cerebro.

El trabajo señala que los patrones de conectividad cerebral de los hombres forman un sistema más eficiente para las acciones coordinadas y las percepciones. Por el contrario, en el cerebro femenino, las conexiones favorecen el razonamiento analítico, el procesamiento de información y la intuición.

Se analizaron los cerebros de 949 personas de entre 8 y 22 años con el objetivo de observar las diferencias entre ambos géneros. Para esto, utilizaron una técnica llamada diffusion tensor imaging (DFI), la cual se basa en la formación de imágenes cerebrales en tercera dimensión que captan el movimiento de agua dentro del cerebro. Así, los investigadores pueden conocer las conexiones estructurales en el cerebro.

Para comprobar las diferencias específicas en los circuitos neuronales entre las distintas regiones del cerebro y en ambos géneros, los autores dividieron a los individuos por rangos de edad en función de las etapas de vida: niñez, adolescencia y edad adulta.

Los resultados mostraron que los cerebros de los hombres tienen una buena conexión intrahemisférica, esto es, dentro del mismo hemisferio, mientras que los de las mujeres tienen una buena comunicación interhemisférica, es decir, entre los dos hemisferios, al nivel donde se localiza el telencéfalo, la parte más grande del cerebro. Por otro lado, los hombres tienen mejor conexión entre hemisferios a nivel del cerebelo, región importante para el control motor, mientras que las mujeres tienen buena conexión intrahemisférica a este nivel.

En la parte superior el cerebro masculino,
en la inferior el femenino. En azul las
conexiones en un mismo hemisferio,
en naranja los circuitos entre hemisferios
Existe una mayor proporción de fibras mielinizadas en los hemisferios cerebrales de los hombres, lo que sugiere que están optimizados para la comunicación dentro de cada hemisferio. Sin embargo, los cerebros de las mujeres están preparados para la comunicación entre hemisferios, indican los investigadores en su artículo.

Esto sugiere que los cerebros de los hombres tienen una estructura que facilita la conexión entre la percepción y la acción coordinada, mientras que el de las mujeres facilita la comunicación entre los modos de procesamiento analítico e intuitivo. Dichos resultados son consistentes con otras investigaciones donde las mujeres han demostrado ser mejores para poner atención y memorizar caras y palabras, mientras que los hombres sobresalen por realizar mejores actividades que involucran procesamiento espacial y velocidad sensomotora.

Este trabajo da más argumentos para explicar por qué los hombres son buenos para ciertas tareas y las mujeres para otras. Por ejemplo, ellos son mejores para aprender y desempeñar una tarea en cuestión como andar en bicicleta o navegar en direcciones, mientras que ellas tienen mayor habilidad para la memoria superior y para las tareas de cognición social, por lo que son mejores para desempeñar muchas actividades a la vez y generar soluciones que funcionan para los grupos.

Además, los autores observaron que existían muy pocas diferencias entre sexos en las conexiones cerebrales en niños menores de trece años. Sin embargo, estas diferencias se acentuaron en edades entre los catorce y los 17 años y en adultos jóvenes.


No existen diferencias significativas entre ambos sexos en la amígdala  mujeres y hombres sienten las emociones de la misma manera

Un estudio sobre las diferencias entre los cerebros de hombres y mujeres, realizado por la Universidad Rosalind Franklin de Medicina y Ciencia (Chicago), publicado en NeuroImage en enero 2017, ha revelado que en la especie humana no existen diferencias significativas entre ambos sexos  en un área cerebral específica: la amígdala.

La amígdala  porción pequeña del cerebro  es la parte del cerebro responsable de las emociones, empatía, agresión y excitación sexual.

Los resultados se contraponen a los de estudios realizados en animales (por ejemplo, en ratas), que habían indicado que la amígdala es desproporcionadamente mayor en los cerebros masculinos. Trasladados estos resultados a humanos, se había sugerido que esta diferencia de tamaño contribuiría a las diferencias sexuales en la emotividad y en la prevalencia de trastornos como la ansiedad y la depresión.

El presente estudio consistió en un meta análisis con enfoque estadístico en el que se combinaron los resultados de múltiples investigaciones previas; decenas de estudios realizados con una técnica llamada resonancia magnética cerebral.

En total se analizaron 58 comparaciones publicadas de volumen de amígdala en grupos de hombres y mujeres sanos (o de niños y niñas). Aunque estos estudios informaban de que la amígdala es alrededor de un 10% mayor en los cerebros masculinos, esta diferencia es comparable al tamaño mayor de los cuerpos de los varones y, más concretamente, se relaciona con el 12% más de volumen cerebral que tienen, con respecto a las mujeres.

Tras corregir las medidas para ajustarlas al tamaño total del cerebro, la diferencia entre hombres y mujeres del volumen de la amígdala resultó insignificante (<0,1% en la amígdala derecha y 2,5% en la amígdala izquierda), y no estadísticamente significativa.


El hipocampo de hombres y mujeres es igual de grande

Una investigación de la Universidad Rosalind Franklin de Medicina y Ciencia publicada en NeuroImage en agosto 2015, demostró que el tamaño del hipocampo, parte del cerebro asociada a la consolidación de nuevos recuerdos y a la conexión de las emociones con los sentidos, es prácticamente del mismo tamaño en el hombre y en la mujer.

Lise Eliot, profesora asociada de neurología en la Facultad de Medicina de la universidad, dirigió un equipo de estudiantes en un meta-análisis de volúmenes del hipocampo medidos con resonancia magnética, que no encontró ninguna diferencia significativa entre hombres y mujeres.

El meta-análisis es una técnica estadística que permite a los investigadores combinar los resultados de muchos estudios independientes en una revisión exhaustiva. El equipo examinó los resultados de 76 trabajos publicados, en los que participaron más de 6.000 personas sanas.

Los hipocampos se encuentran a ambos lados del cerebro, bajo la corteza cerebral. Los hallazgos del equipo desafían la afirmación habitual de que un hipocampo desproporcionadamente mayor explica la tendencia de las mujeres hacia una mayor expresividad emocional, habilidades interpersonales más fuertes y una mejor memoria verbal.


Los mapas cerebrales reflejan las diferencias de comportamiento entre hombres y mujeres

Investigación realizada por científicos de la Perelman School of Medicine de la Universidad de Pennsylvania, publicada en la revista Philosophical Transactions of the Royal Society B en febrero 2016.

La investigación se llevó a cabo con 900 personas. A todas ellas se les realizaron escáneres cerebrales con la técnica de imágenes por resonancia magnética con tensores de difusión (DTI o ITD); así como una batería computarizada de test psicológicos, destinados a medir la seguridad y la velocidad de su rendimiento cerebral. Con estas técnicas, los investigadores lograron desarrollar un conectoma estructural  un mapa de las conexiones neuronales del cerebro de cada sujeto.

Este conectoma reveló que algunas diferencias en los comportamientos de hombres y mujeres iban en paralelo a ciertas distinciones relacionadas con dichas subredes cerebrales.

En concreto, una conectividad estructural más fuerte en las funciones motora, sensorial y ejecutiva encajaba con mayores habilidades espaciales y motoras en los hombres. En las mujeres, las subredes asociadas con la cognición social, la atención y la memoria presentaban una mayor conectividad, lo que encajaba con unas habilidades cognitivo-sociales y de memoria superiores en ellas que en los varones.


No hay un cerebro masculino y otro femenino

Un grupo de investigadores israelíes, alemanes y suizos de la Universidad de Tel Aviv en un estudio publicado en Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS) en diciembre 2015, ha comparado la anatomía de 1.400 cerebros de hombres y mujeres para concluir que, más que dos categorías, lo que hay es un mosaico cerebral.

El cerebro de cada uno es un mosaico con elementos tanto femeninos como masculinos.

Los investigadores recopilaron imágenes del cerebro de voluntarios de varios proyectos científicos. Las neuro-imágenes se obtuvieron con distintas tecnologías y métodos para evitar sesgos. Mientras unas determinan mejor el grosor de la corteza cerebral, otras registran la estructura y dimensiones de las distintas áreas del cerebro.

No hay ninguna región en las muestras que revele una clara distinción entre una forma masculina y una forma femenina, es decir, que se presente de forma evidente solo en los hombres o solo en las mujeres. En realidad, hay un alto grado de superposición entre mujeres y hombres en todas las regiones estudiadas.

Para que un cerebro humano pudiera clasificarse como exclusivamente de hombre o de mujer, explican los científicos, debería haber un alto grado de dimorfismo y una gran consistencia interna en los rasgos definitorios. Pero la comparación entre la materia blanca, la materia gris y las conexiones cerebrales de 1.400 cerebros concluyó que las características de ambos sexos se solapan. Hay rasgos que están más presentes en uno u otro sexo, pero no hay una barrera nítida que separe los unos de los otros.

La mayoría de los humanos tienen cerebros compuestos por mosaicos de características que los hacen únicos, algunas son más comunes entre las mujeres en comparación con los hombres y otras lo son más en los hombres respecto de las mujeres y aún otras son comunes tanto a hombres como a mujeres. Lo que significa que, en lo que respecta a la estructura del cerebro, hay muchas maneras de ser mujer. Tantas como de ser hombre.


Los hombres tienen más materia blanca, y las mujeres tienen más materia gris

Un estudio de la universidad de Pensilvania, publicado en ScienceDaily en 1999, que analizó mediante escáneres cerebrales a 949 personas con buena salud (521 mujeres y 428 hombres) de entre nueve y 22 años, concluyó que las redes cerebrales podrían explicar las diferencias de comportamiento entre los dos sexos y algunas creencias comunes sobre su comportamiento, como que los hombres tienen más habilidades motoras, o que las mujeres tienen mayor intuición.

Tras realizar una resonancia magnética a 80 voluntarios sanos, de entre 18 y 45 años, se llegó a la conclusión de que las mujeres tienen un mayor porcentaje de materia gris, y los hombres tienen un mayor porcentaje de materia blanca, además de una mayor cantidad de líquido cefalorraquídeo. De hecho, este mayor parte de materia gris en las mujeres tendría bastante lógica, pues se sabe que las mujeres suelen tener un cráneo más pequeño, por lo que no necesitarían tanta materia blanca  conexión entre áreas cerebrales  por puro espacio anatómico.

Además, los investigadores especulan que dicho porcentaje añadido de materia gris contribuiría a las diferencias en el funcionamiento cognitivo entre hombres y mujeres, especialmente en la capacidad de estas últimas para superar a los hombres en tareas como el lenguaje.

La investigación reveló en el hombre una mayor conectividad neuronal de adelante hacia atrás, y dentro de uno de los hemisferios, lo que sugirió que sus cerebros estaban estructurados para facilitar la conectividad entre el centro de la percepción y la acción coordinada. En cuanto a las mujeres, estas conexiones unían el hemisferio derecho, donde se halla la capacidad de análisis y el tratamiento de la información, hasta el hemisferio izquierdo, centro de intuición.

Lo cual explicaría por qué las mujeres son más intuitivas, tienen mejor memoria, habilidades sociales e inteligencia emocional, y por qué los hombres poseen una mejor coordinación y percepción del espacio, están más orientados a la acción, y son mejores en tareas que requieren una respuesta inmediata.

La parte izquierda del cerebro es responsable del pensamiento lógico, mientras que al derecho corresponde el intuitivo. De esta manera, si una tarea implica ambos procesos, parece que las mujeres podrían hacerlo mejor.

Según los investigadores, estos resultados sugieren que los cerebros masculinos están estructurados para facilitar la conectividad entre la percepción y la acción coordinada, mientras que los cerebros femeninos estarían diseñados para facilitad la comunicación entre los modos de procesamiento analítico e intuitivo.

El estudio concluyó que los hombres eran más aptos para aprender y ejecutar una sola tarea, mientras que las mujeres tenían una memoria superior y una mayor inteligencia social.

El cerebro se divide en dos grandes zonas: La materia gris (núcleos neuronales) y la materia blanca (conexiones entre neuronas). Se compone de tres estructuras: cerebro, cerebelo y tronco cerebral.

Por su parte, el cerebro se divide en los hemisferios derecho e izquierdo, donde se encuentran la materia gris y la materia blanca. La zona más externa o corteza se compone de materia gris, donde se encuentran los núcleos neuronales. Dicha materia gris contiene las zonas especializadas en las tareas cognitivas como la memoria, la atención, la conciencia, el pensamiento o el lenguaje. Esta materia gris ocupa el 40% del cerebro, mientras que la materia blanca ocupa el otro 60% restante.

La sustancia blanca permite la comunicación desde y hacia la materia gris, y entre las diferentes zonas corporales y dicha materia gris, donde se procesará la información finalmente en la corteza.


 *
*    *

Diferencias entre el cerebro de hombres y mujeres


Más allá del feminismo moderno y otras corrientes de moda, el hombre y la mujer no son exactamente iguales, sí lo son como seres humanos, en sus valores y derechos, pero desde el punto de vista biológico, la evolución los ha dotado con sistemas nerviosos distintos para realizar los papeles necesarios en la supervivencia de la especie, algo que ocurre en todo el reino animal.


Especialización cerebral

Aunque el cerebro del ser humano en general puede realizar muchas tareas y concentrarse en algunas más específicas que otras, lo cierto es que el aparato mental del hombre está más orientado a la especialización, esto es, que partes de cada hemisferio se focalizan en determinadas labores. En el caso de la mujer, hay una utilización más integral de ambos hemisferios en un número mayor de actividades, lo que se llama multitareas.

Segmentación de la información

En el cerebro masculino, la información se separa en grupos o segmentos que no están necesariamente relacionados, desde las emociones a las relaciones personales, hasta contenido profesional. En el femenino, todo se enlaza como un sistema. Por eso las mujeres tienden a ser holísticas.

Concentración en las tareas

A causa de estas diferencias entre los cerebros del hombre y la mujer, los varones suelen concentrarse a fondo en las actividades que realizan, sin distraerse en otros aspectos. Las mujeres, por el contrario, observan cada evento del mundo como un dibujo completo, con cada una de sus partes interactuando.

Los sentidos en el hombre y la mujer

También en los sentidos y la percepción del mundo hay diferencias entre el hombre y la mujer. En el hombre, la vista es la función dominante, la vía por la cual le entra al sistema nervioso la mayor parte de la información. En las mujeres todos los sistemas operan en conjunto, como los ciegos, tienen muy desarrollados los sentidos del oído, el olfato y el tacto, pero sumados a la visión.

Hemisferios cerebrales y habilidades cognitivas

En el hombre el hemisferio cerebral izquierdo tiene una mayor dominancia. En el caso de las mujeres, se da un balance en el uso de ambos hemisferios, el izquierdo y el derecho. Por eso en las habilidades cognitivas, podemos observar que hay una mayor tendencia en los hombres a ser buenos en las matemáticas y las operaciones de cálculo, mientras que las mujeres tienen facilidad para el lenguaje, actividad que requiere del uso de varias zonas dentro del cerebro.

Capacidad de planificación


Las zonas de la corteza prefrontal, sede de las funciones ejecutivas, son más voluminosas en las mujeres que en los hombres. Eso explicaría por qué las mujeres tienen más funciones de planificación, organización y control de impulsos.




Empatía emocional

Esa capacidad de ponerse en el lugar del otro y entender sus sentimientos está más presente en la mujer, y eso se debería a las diferencias en el sistema de neuronas espejo, la cual se activa cuando reconocemos emociones en la expresión de otros. En cambio, los varones utilizan más el sistema de uniones temporo-parietales, es decir, el de la empatía cognitiva que lleva a la búsqueda de soluciones.

Memoria emotiva

La amígdala, importante para recordar los sucesos emotivos reacciona distinto en varones y mujeres. Los primeros conservan más la memoria de la esencia, es decir, se activa más la amígdala derecha, lo contrario que en las mujeres que recuerdan más los detalles.

Orientación y visión espacial

El hipocampo, la estructura cerebral para la orientación espacial, es mayor en mujeres que en varones. Eso explicaría que los hombres tiendan a estimar las distancias, mientras que las mujeres se basan en puntos concretos de referencia.

Cerebro más grande

En promedio, el cerebro de los hombres es más grande que el de las mujeres, pero eso no es sinónimo de más o menos inteligencia. La razón se basa en el disformismo sexual asociado al mayor tamaño corporal de los varones. Sin embargo, las diferencias en inteligencia se atribuyen más a las conexiones neuronales, relacionadas a la carga genética de cada uno y a sus experiencias personales.

Agresividad

Los varones tienen sobredimensionada el área premamilar, una región del hipotálamo vinculada a la defensa del territorio que es más activa que en las mujeres.

Conducta sexual

La parte del cerebro que procesa la sexualidad es dos veces mayor que el de las mujeres, y en otros mamíferos como los roedores, los machos tienen hasta 7 veces más este comportamiento.

Cerebro multitarea

La mujer tiene el don de poder hacer varias cosas al mismo tiempo, a diferencia de los hombres, según un estudio de la Universidad de Pensilvania realizado en el año 2013. Sin embargo, también es cierto que no siempre el resultado sea eficiente.


Los resultados de todas estas investigaciones apuntan a que los cerebros de hombres y mujeres son muy distintos pero también muy parecidos. Es decir, implican que la discusión sobre el dimorfismo sexual cerebral de los humanos no tiene una respuesta simple. No debería sorprendernos, dada la complejidad de este órgano, considerado un hecho evolutivo excepcional.

Desde un punto de vista médico, comprender bien las diferencias cerebrales entre ambos sexos es importante porque estas pueden ayudar a comprender por qué hombres y mujeres sufren enfermedades mentales diferentes y a tratarlas. Por ejemplo, se sabe que los hombres son mucho más propensos a padecer autismo que las mujeres y las mujeres más propensas a la depresión o la ansiedad que los hombres.

Algunos especialistas creen que las diferencias entre los cerebros masculino y femenino se deben a la tradicional división de trabajo que ha existido no sólo en el ser humano, sino también en otros animales que nos han precedido en la escala filogenética.

Français : La structure cérébrale des hommes et des femmes


No hay comentarios.:

Publicar un comentario